Es el profesional del derecho investido de fe pública por el Estado que por delegación del Ejecutivo ejerce una función de orden público y tiene a su cargo recibir, interpretar, redactar y dar forma legal a la voluntad de las personas que ante él acuden, así como autenticar y dar certeza jurídica a los actos y hechos pasados ante su fe, mediante la consignación de los mismos en instrumentos públicos de su autoría.
El Notario te asesora de forma gratuita e imparcial, aconsejándote que tipo de acto o contrato te conviene realizar.
Su intervención previene posibles litigios y simplifica los procedimientos de ejecución, constituyendo un medio alternativo en la solución de conflictos.
El Notario es auxiliar de la administración de justicia y puede intervenir como consejero, mediador, conciliador o árbitro, en concurrencia con los órganos jurisdiccionales, en el trámite de negocios de jurisdicción voluntaria y de los procedimientos sucesorios en los casos que expresamente la Ley lo autorice.